Capítulo seis
Cruce de ríos.
La lluvia se calma y siento frío, veo el desastre a mi alrededor. Lalo y otra persona se encuentran inconscientes en el suelo y la chica que perseguimos por todo el convento se encuentra en posición fetal en la fuente, mientras Elisa trata de entender toda esta situación frente a nosotros.
Trato de razonar en mi cabeza como llegamos a este punto y recuerdo que al escuchar aquel grito corrimos hacia una habitación en donde encontramos a una chica con un camisón blanco consumido por el fuego, las marcas en su rostro confirmaban haber pasado por un accidente.
Al escuchar un disparo la chica echó a correr a tropezones por todo el lugar, y nosotros detrás de ella.
Encontramos a Lalo, abrazado de otro chico que se encontraba en el suelo inconsciente. La chica comenzó a saltar erráticamente en la fuente hasta que cayó y no se levantó más.
Reviso mi celular y veo que son cuarto para las cinco: con la cabeza revuelta entre preguntas y miedos no tengo idea de qué hacer, solo siento el frío de la mañana y me pregunto hasta donde me ha llevado mi curiosidad.
—¡Lalo, Lalo estás bien!—
Ese grito me saca de mi lamento y empiezo a volver a la realidad. Lo primero que pienso es que… Debemos correr de este lugar.
—¿Te sientes bien?, que pasó— pregunta Elisa con desesperación mientras le ayuda a levantarse.
—Estoy bien… Estoy bien… Me duele la cabeza… Estoy bien— responde Lalo todavía atolondrado.
—¡Nos tenemos que ir de aquí ahora!— grito mientras tomo al chico que está en el suelo.
—Lalo y yo nos lo llevamos al chico y tú ve por ella—
Entre empujones y con mucho esfuerzo todos terminamos en el auto de Lalo, un bocho casi destartalado en donde colocamos a dos chicos más muertos que vivos, dos chicas alteradas y yo detrás del volante de un carro por quinta vez en mi vida.
Por que la suerte esta de mi lado nada pasó y llegamos a mi casa. Ha sabiendas de que mis padres salieron de viaje traje mi torbellino de gente desquiciada adentro de mi casa. Y ahora podemos pensar con tranquilidad ¿De dónde chingados salieron estos dos?
¿Tomarán café?, ¿Dónde está la correlación? y más importante ¿Solo nosotros sabremos de esto?
También te puede interesar: La raíz del Ahuehuete V
También te puede interesar: En el último beso

Pingback: Astromelia Superba - Revista Brújula MX
Pingback: La raíz del Ahuehuete VII - Revista Brújula MX